El edificio está formado por cinco alturas y una vivienda por planta, obteniendo así, una mezcla de privacidad y confort. Buscar la ligereza en el edificio es uno de los primeros objetivos para que la parte dirigida hacia el mar sea lo más abierta posible y así se puedan disfrutar las vistas.

Por lo tanto, las viviendas están orientadas al mar a través de los salones y las terrazas. Estos espacios, permitirán tener una iluminación natural en gran parte de la vivienda. Por delante, en la parte frontal, nos encontramos con una terraza descubierta, que cambia de ubicación en cada planta, a derecha o a izquierda.

El edificio en su totalidad y su distribución nos permiten tener una gran conexión con el exterior y también mantener la privacidad de la vivienda. La zona delantera es más transparente, gracias a los grandes ventanales que tenemos en la parte frontal, teniendo vistas de más de 180 grados hacia la costa. Mientras tanto, la parte trasera se comporta de una manera diferente, con menos espacios abiertos para adquirir así la privacidad necesaria en este tipo de estancias.

Se consiguen así, espacios abiertos al mar y hacia la costa de la ciudad de San Juan y de Alicante.